Esta claro que estos animales no están predeterminados a tener un programa decente en parrilla. Tras aquella aberración de hormigas blancas (Existens¿?) que ya mencioné en su momento con una bochornosa presentación de transfobia. Pues bien, existe un programa de humor que tiene como nombre el hogar de estos animales, el hormiguero, y que tiene un sección en la que el presentado y una colaboradora hacen una especie de guerra patética de sexos que:
- Sólo consigue llamar la atención de aquellas personas que quieren sentirse indentificadas con los rolres más tradicionales y casposos de género (en un intento de defenderlos y hacerlo ver como algo moderno, cool y aceptable, y lo que es peor: inevitable)
- Obvia todo tipo de comportamientos no estereotipados, negándolos
- Y, como no, obvia todas realidades sexuales que no sean heterosexuales y heterosexistas.
Y yo pregunto: ¿Se creen graciosos y progresistas cuando son una versión mala (¡Se puede!) de escenas de matrimonio
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